La instalación, llamada Revolving room, ya estuvo en el museo Guggenheim de Nueva York en el 2009. La propuesta del artista Carsten Höller consiste en trasladar al museo una cama que gira constantemente y que se sitúa en un entorno similar al de una habitación de hotel. Un mayordomo está al servicio de los huéspedes y les sirve la cena y el desayuno.
Los que han conseguido reservar la habitación --sólo ha habido una por noche-- pueden pasear por el museo al cualquier hora a su antojo. Sin embargo, nuestro anuncio llega tarde, porque ya están todas la noches reservadas (costaban entre 275 y 450 euros, con media pensión).
En este momento, sólo es posible pasar la noche del sábado 20 de marzo del 2010, la última noche de la Revolving Room. Para ello, hay que pujar. El mejor postor en www.artrotterdam.com antes del 18 de febrero se llevará la noche. La puja mínima es de 450 euros.
Highest bid: € 2.010,-
ResponderEliminar2010 euros por dormir y marearse al propio tiempo con tanto giro lechal (del lecho).
No sé yo si la idea me gusta. Supongo que las cámaras del museo, activas, la cama dando vueltas, imposibilidad, supongo, de ponerse la radio para dormir, distancia apreciable entre el lavabo para lavarse los dientes y la cama giratoria... y a levantarse temprano, que el museo debe abrir por la mañana... no sé... no me vería yo...